¡El secreto detrás de las donuts de manzana que se derriten como mantequilla, tus meriendas nunca serán las mismas!

¿Te encanta la tarta de manzana? Entonces te sorprenderá esta deliciosa alternativa en forma de donuts. Sigue leyendo para descubrir cómo hacer un postre que combinará a la perfección con tus ganas de algo dulce y saludable.

Si eres fan de la tarta de manzana, estos donuts te encantarán. Son fáciles de hacer y requieren solo unos cuantos ingredientes, convirtiéndose en una opción deliciosa para disfrutar en cualquier momento.

La clave para que los donuts de manzana queden siempre crujientes está en su preparación y conservación. Con las cantidades adecuadas, podrás hacer entre 25 y 30 donuts. Para mantenerlos bien, evita el refrigerador y guárdalos en un recipiente hermético o bajo una campana de vidrio.

Cómo preparar donuts de manzana crujientes

Comienza preparando la masa que envolverá las rodajas de manzana. Bate los huevos con una pizca de sal en un tazón, añade la leche a temperatura ambiente y mezcla bien. Tamiza la harina con el polvo de hornear para evitar grumos y mezcla energéticamente. Cubre la masa con plástico alimentario y resérvala.

Lava bien las manzanas; aunque las pelarás después, es importante asegurarte de que estén limpias. Exprime un limón y pasa su jugo por un colador. Pela las manzanas, retira el corazón, córtalas en rodajas de medio centímetro y cúbrelas con el jugo de limón para evitar que se oscurezcan.

Consejos para freír y servir donuts de manzana

Calienta aceite de semillas en una sartén grande a 170°, la temperatura ideal para freír. Mientras el aceite se calienta, sumerge cada rodaja de manzana en la masa, asegurándote de que queden bien cubiertas. Fríe de dos a tres rodajas a la vez para que la temperatura del aceite no baje. Gíralas hasta que estén doradas y colócalas sobre papel absorbente para retirar el exceso de aceite.

Finalmente, espolvorea los donuts con una mezcla de azúcar y canela, o usa solo uno de los dos ingredientes, según tu preferencia. Deléitate con estos exquisitos donuts de manzana como postre o merienda. ¡Una opción saludable y sabrosa!

“No hay amor más sincero que el amor a la comida”, afirmaba George Bernard Shaw, y en el corazón de nuestra gastronomía, los dulces caseros ocupan un lugar especial. Los donuts de manzana no son la excepción a esta regla, transformándose en una deliciosa excusa para reunirnos alrededor de la mesa.

Este postre, que combina la sencillez con el sabor auténtico de las manzanas, nos recuerda que no es necesario complicarse para disfrutar de los placeres de la vida. La clave está en la calidad de los ingredientes y el amor puesto en su preparación. Así, estos donuts se convierten en más que un simple bocado: son un símbolo de la calidez del hogar y de los momentos compartidos.

Deja un comentario